Colombia

Andreas y Hannah del programa "Derecho a rechazar a matar" de la Internacional de Resistentes a la Guerra (IRG) visitaron Colombia en noviembre de 2012 para encontrarse con grupos antimilitaristas, reconectarse con antiguos contactos y planear nuevas maneras en que la IRG puede brindarles un acompañamiento internacional eficaz. Muchos de los grupos con que se reunieron son miembros de ANOOC (Asamblea Nacional de Objetores y Objetoras de Conciencia) una asamblea de grupos que trabajan la objeción de conciencia a nivel nacional.

El conflicto en Colombia, en sus expresiones más recientes se remonta al año 1948, cuando es asesinado el candidato a la presidencia Jorge Eliecer Gaitán y se trunca la posibilidad de que las ideas de carácter socialista obtuvieran lugar de decisión y poder en el estado colombiano.

El pasado 26 de noviembre de 2011, mediante un panfleto dejado en el domicilio de un miembro de la Unión Sindical Obrera – USO, la banda criminal asociada al narcotráfico autodenominada “Los Rastrojos” ordena a las Organizaciones Defensoras de Derechos Humanos de la ciudad colombiana de Barrancabermeja (CREDHOS, USO, Organización Femenina Popular – OPF, Gente en Acción, Espacio de Trabajadores y Trabajadoras de Derechos Humanos de Barrancabermeja – ETTDH, Colectivo Quinto Mandamiento, Fundación DRC, SINTRAINQUIGAS, ANDAS) desistir de sus “actividades de caridad, de marchas, eventos, netc.”, p

Alejandra Londoño Bustamante, Red Juvenil de Medellín

Soy objetora por conciencia, porque no creo que la objeción sea una figura jurídica de respaldo a una negativa, sino por el contrario una forma legítima de organización social y colectiva que propende inicialmente por el cambio de las y los individuos para la construcción de un proyecto de sociedad.

Colombia es un país caracterizado por la violencia diaria y las enormes diferencias entre la población rica y la población pobre. El país se encuentra muy militarizado, y existe una guerra civil desde hace más de 40 años. El Ejército del gobierno, las guerrillas FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) y ELN (Ejército de Liberación Nacional) junto con los cuerpos paramilitares tienen una presencia evidente en la sociedad, por sus actos violentos y porque reclutan a jóvenes. El militarismo es espejo del patriarcado colombiano.

Empecemos con la ubicación en los departamentos del país de las brigadas del ejército colombiano que reciben asistencia o ayuda militar de EE.UU. Lo que se nos muestra es que la mayoría de las brigadas tienen algún tipo de vínculo con la cooperación militar, exceptuando según las fuentes oficiales la brigada 1, 5, 17 y 30.

La Internacional de Resistentes a la Guerra recibió informes de varios de sus socios en Colombia que las " batidas "- el reclutamiento de jóvenes en redadas en las calles - continúan realizándose. Algunos de los reclutados durante las últimas batidas declararon su objeción de conciencia y dos están incluidos en la Lista de Honor de Presos por la Paz de 2010 de la IRG.

de World War 4 Report

La empresa de seguridad privada Blackwater violó las regulaciones sobre tráfico de armas de los EE.UU. cuando entrenó a personal militar colombiano en 2005, indica un informe del Departamento de Estado norteamericano. La polémica empresa, rebautizada como Xe Services LLC en 2009, debe pagar $42 millones por violar ley de los EE.UU., lo que incluye el entrenamiento militar no autorizado de los soldados colombianos -evidentemente para prestar servicios privados en Iraq y Afganistán- en abril y el mayo de 2005.

Suscribirse a Colombia